Los agricultores británicos podrían ahorrarse millones en sus gastos de comida para los animales si la Unión Europea sigue adelante con las polémicas propuestas de flexibilizar la prohibición del uso de proteínas de origen animal para el alimento de pollos y cerdos. El movimiento viene 14 años después de que la práctica fue prohibida en la coyuntura de la crisis de la Encefalopatía Espongiforme Bovina, con el acuerdo de la Comisión Europea de tomar una decisión final para la prohibición en el 2009.
Según los proyectos, la prohibición para la alimentación permanecerá para los rumiantes, pero sería levantado para cerdos y pollos. Esto proporcionaría una fuente alternativa de comida para muchos agricultores que han sido golpeados elevándose gastos de entrada, y podrían bajar drásticamente el coste de los piensos.
Los científicos de la Unión Europea están completando actualmente una investigación en el tema que será presentado a los Comisarios al final de año para que la decisión final sea tomada.
El Departamento de Agricultura de Inglaterra (Defra) ha dicho que sólo respaldará la relajación de la flexibilización si la Unión Europea puede asegurar que se han llevado a cabo pruebas rigurosas.
Según los proyectos, la prohibición para la alimentación permanecerá para los rumiantes, pero sería levantado para cerdos y pollos. Esto proporcionaría una fuente alternativa de comida para muchos agricultores que han sido golpeados elevándose gastos de entrada, y podrían bajar drásticamente el coste de los piensos.
Los científicos de la Unión Europea están completando actualmente una investigación en el tema que será presentado a los Comisarios al final de año para que la decisión final sea tomada.
El Departamento de Agricultura de Inglaterra (Defra) ha dicho que sólo respaldará la relajación de la flexibilización si la Unión Europea puede asegurar que se han llevado a cabo pruebas rigurosas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario